"No podemos esperar más por el impulso del coche eléctrico"

En 2015, Nissan celebró su primer foro sobre el sector de los vehículos eléctricos. Un año después, los actores principales, administraciones, asociaciones de fabricantes, empresas de distribución y gestores de carga, han vuelto a sentarse en Madrid para analizar los avances realizados y la situación en nuestro país.
Marco Toro, consejero director general de Nissan Ibérica, la resumió escuetamente con la frase de "No podemos esperar más". El sector del vehículo eléctrico necesita urgentemente un impulso general para su despegue, a riesgo de abortar el desarrollo conseguido hasta ahora.
España es uno de los países más implicados industrialmente en el coche eléctrico, tercero en producción de vehículos de este tipo en Europa y primero en cuanto a la diversidad de fabricación, con cinco modelos diferentes ensamblados en las factorías españolas.
Los diferentes planes de ayuda estatales como el Movele de 2015 han cosechado sus frutos, ya que las ventas de eléctricos en nuestro país se han triplicado en los últimos meses. No obstante, nos encontramos aún muy lejos de otros países de nuestro entorno, como por ejemplo nuestra vecina Francia donde el parque eléctrico ya está en torno a los 2 millones de vehículos, diferencia abrumadora frente a las escasas 10.000 unidades que se mueven por España.
Episodios de alta contaminación
Las razones de este retraso la encontramos en una de las principales conclusiones emanadas del II Foro Nissan: hace falta un consenso general de todos los actores que participan en el sector. De lo contrario el coche eléctrico podría estar condenado a morir en nuestro país.
El problema se ha vuelto más acuciante si cabe al registrarse en los últimos tiempos climatologías desfavorables que han propiciado en las grandes capitales episodios de alta contaminación. Estas circunstancias han inclinado a la opinión pública a prestar mayor atención a los automóviles de emisiones cero. Pero las características propias de los eléctricos siguen siendo una traba para su adquisición, no ya sólo para los particulares sino también para las empresas.
Autonomía restringida, casi nula disponibilidad de infraestructuras de recarga (entre las 900 declaradas en España muchas no funcionan y otras tantas son ya obsoletas) y disparidad de normativas al respecto por parte de las múltiples administraciones implicadas, suponen una barrera por el momento infranqueable para la impulsión definitiva del eléctrico.
Infraestructuras, punto crítico
Por parte de los fabricantes se están haciendo grandes esfuerzos tecnológicos y en inversiones para popularizar la compra de un eléctrico. Por ejemplo la propia Nissan desde febrero comercializa su Leaf con un 26 por ciento más de autonomía y ofrece la instalación y tramitación gratuita de cargadores domésticos a sus clientes. También plantea al comprador un periodo de prueba de tres meses del vehículo eléctrico al cabo del cual podrá cambiarse por un modelo similar de motor térmico si la versión eléctrica no se adapta a sus necesidades. Incluso se ha previsto por parte de la marca una fórmula incluida en la compra de un eléctrico que ofrece 14 días de alquiler de un Nissan con motor de combustión para los desplazamientos más largos de vacaciones.
Los gestores de puntos de recarga necesitan por su parte una organización conjunta de las infraestructuras. Aunque éstas siguen creciendo, lo hacen a un ritmo muy lento y estamos todavía muy lejos del potencial necesario para popularizar el coche eléctrico. Por ejemplo, respecto al referente francés, estamos todavía en una desproporción del 1 al 10 en cuanto a puntos de carga rápida. Las infraestructuras son consideradas como el punto crítico en este momento.
Para solventar el problema sería necesaria la interconexión a puntos estratégicos de suministro eléctrico y para ello se requiere un cambio regulatorio en el sector de la distribución. La instalación de un punto de recarga es muy costosa, más concretamente de unos 50.000 euros, y tras los primeros que se instalaron en España se ha visto que los usuarios son prácticamente inexistentes y, lo que es más frustrante para las eléctricas, no han registrado incrementos significativos. La mayoría de la flota de vehículos eléctricos pertenecen a flotas de empresa, que recargan en sus propios parques, y los usuarios particulares suelen hacerlo en sus domicilios. La solución pasa por inversiones ya que de lo contrario la estructura pública no va a crecer más y un operador que centralizara las gestiones de recarga de una forma general sin multiplicidad de tarjetas, conexiones (a partir de noviembre será obligatorio el conector único), tarifas,?etc.
Necesidad de un Plan Integral
El problema de las administraciones parece sin embargo el más difícil de resolver en el tiempo. Estado, autonomías y ayuntamientos han ido hasta ahora cada uno por su lado a la hora de apoyar al coche eléctrico y han creado una situación confusa a la hora de estimular la compra.
Para los fabricantes, los planes de ayudas estatales como el pasado Movele o el actual Movea necesitan tener una continuidad plurianual para garantizar la estabilidad de las ventas y el despegue definitivo del eléctrico. En cuanto a las administraciones locales, se requiere con urgencia un acuerdo en cuanto a las ordenanzas de aparcamiento, uso del bus-vao, accesos a zonas de tráfico restringido, uso de los peajes,?etc, ahora diferentes incluso dentro de una misma comunidad.
Por todo lo anterior, y como se ha concluído en el II Foro Nissan, se hace indispensable y urgente la creación de un Plan Integral de actuación para el correcto desarrollo de la movilidad sostenible.
Asistentes al II Foro Nissan de la Movilidad Sostenible_
- Marco Toro, Consejero Director General Nissan Iberia
- Mariano González Sáez, Director General de Medioambiente de la Comunidad de Madrid
- José Antonio Díaz-Lázaro Carrasco, Coordinador General de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid
- Mario Armero Montes, Vicepresidente de ANFAC
- Jon Asin Muñoa, Presidente de AEDIVE y Responsable de Desarrollo de Negocio Infraestructura del Vehículo Eléctrico en INGETEAM
- Mónica Espinosa, Directora de Estrategia y Desarrollo Comercial de ENDESA
- Enrique Monasterio, Director General de IBIL
- José Carlos Espeso, coordinador de Movilidad Sostenible de CALIDAD PASCUAL
- Alfredo de la Torre, Director de Desarrollo Comercial en INGETEAM Fuente: Juan Luis Soto para Ecomotor